Gacetillas de prensa del Gobierno con declaraciones que no se atribuyen a ningún funcionario, utilización por parte del Gobierno de fotos tomadas por los trabajadores de prensa de las entidades sindicales, periodistas “oficialistas” que debaten por whatsapp sobre la pésima gestión del área de comunicación del Gobierno provincial ante la escasez de gacetillas sobre temas puntuales (reunión de gremios con el Juez Penza), periodistas “oficialistas” que intentan tergiversar los hechos intentando no publicar las acciones que demuestran la contundencia del reclamo y la fortaleza de la unidad, periodistas “oficialistas” que hablan de fracaso de la acción gremial por levantar un corte de ruta, periodistas “oficialistas” que critican a los dirigentes gremiales después de terminar una comunicación telefónica, pautas publicitarias del Gobierno hacia periodistas y medios “oficialistas” que siguen autodeterminándose como independientes, volantes de difamación a dirigente gremiales, creación de cuentas falsas en las redes sociales para difamar a dirigentes gremiales, entrega de material periodístico de parte del Gobierno a periodistas “amigos del poder” y no a todos los medios restringiendo de esa manera el acceso a la información pública, fuertes aprietes a los trabajadores de los canales públicos, medios nacionales reflejando lo que acontece en Tierra del Fuego, corredores de motos reclamando a los trabajadores estatales lo que le deben reclamar al Gobierno, y cerrando el fin de semana la Gobernadora se tomó el araba y se vino a Río Grande para hablar en el acto de premiación de la Vuelta a la Tierra del Fuego.   

Estas son solo algunas de las “cosas” que se pudieron observar durante el fin de semana largo, donde muchos sectores del Poder (y periodistas “oficialistas”) creían que la protesta de los trabajadores estatales se fracturada y se caía definitivamente. No se podía esperar otro análisis de parte de aquellos que solo ven en este conflicto la posibilidad de posicionarse de mejor manera en la búsqueda de intereses políticos y económicos.

Muchos vecinos de la provincia, ajenos al conflicto, pero perjudicados indirectamente, coinciden en charlas de familias y de amigos sobre la ausencia del Estado para enfrentar situaciones extremas.

El título de la nota “El mástil de la unidad”, también podría haber sido “La carpa de la unidad”, “El acampe de la unidad”, “La marcha de antorchas de la unidad”, “La peña de la unidad”, “Los piquetes de la unidad”, “La vigilia de la unidad”, etc.

Lo cierto es que es el Gobierno de Rosana Bertone decidió “ajustar” a los trabajadores estatales, a los jubilados y discapacitados, y ahora debe soportar el conflicto más extenso y duro del sector público en toda la historia de Tierra del Fuego; con los trabajadores en la calle, sosteniendo una unidad de acción entre los gremios estatales que tampoco tiene antecedentes de esta magnitud en la provincia.

Pasó semana santa y “la Casa (de Gobierno) no está en orden”; solo está en orden la UNIDAD DE LOS TRABAJADORES, Y AL QUE NO LE GUSTA, SE JODE, SE JODE!!!

Daniel Garay

Fuente: gremialesdelsur.com.ar