Solo en los últimos días ocurrieron los casos de Arisco (Unilever) en Mendoza, Dupont y Ersa en Córdoba, y Arcor en San Luis.

El martes también tuvieron malas noticias 300 empleados del fabricante de zapatillas Dass, de Eldorado (Misiones). La planta donde se fabricaban productos de Nike y de Adidas, entre otras marcas, entró en una reestructuración por la competencia con las importaciones. Otros 300 empleados fueron licenciados.

Así como Dass, las empresas están analizando reducir sus dotaciones y varias ya lo están haciendo. En primer lugar, porque la recesión agudizó sus números (aunque en parte, pudieron licuarlo con la grave caída del salario real) pero, también, porque entienden que será más difícil hacerlo con el nuevo Gobierno, por presiones o, incluso, prohibiciones o subas de las indemnizaciones y buscan anticiparse para evitar afrontar mayores costos, indica El Economista.

Tampoco se espera, en 2020, un gran año para las ventas, lo que podría generar un repunte del empleo. Sin ir más lejos, el Secretario Gremial del Sindicato de la Alimentación (STIA) de San Luis, Gustavo Sosa, confirmó a Télam el despido de 42 trabajadores de la planta Arcor en la capital provincial. También, hubo 50 despidos en la empresa de transporte Ersa en Córdoba.

En la planta de aderezos y salsas de Unilever se concretaron alrededor de 130 despidos en Arisco, también por la caída del consumo.

Asimismo, la empresa Alco Canale resolvió el despido de 25 trabajadores de la planta que funciona en Sumalao en el departamento Valle Viejo, en la provincia de Catamarca.

Y la corredora de granos BLD estaría avanzando con la desvinculación de nada menos que 360 empleados, aunque su accionar tenga que ver más con los problemas judiciales de la empresa que por el contexto.

Fuente: iproup.com